Hoy hemos ido toda la familia de excursión. El lugar elegido ha sido la montaña de Monserrat. Parece mentira, pero nunca antes había estado. Y mira que está cerca de Barcelona, o será precisamente por eso, el caso es que siempre había querido ir, pero por diferentes razones (la más habitual el famoso "ya iré") no lo había hecho nunca.
Sin duda ha sido un error, que finalmente, hoy he subsanado. Y de paso me he llevado a mi maridito y mis peques.
Monserrat tiene de todo: Preciosos paisajes para ver, naturaleza para descubrir, mucha cultura y mucha tradición. Yo hubiera hecho mil cosas pero con los niños, ya se sabe, hay que elegir, y hoy hemos decidido empezar por lo cultural y tradicional.
Es muy fácil llegar a Monserrat desde Barcelona. Se puede hacer por ejemplo en los FFCC. Sin embargo, nosotros hemos decidido ir en coche, por aquello del cansancio de los niños al regreso, y hemos hecho bien porque mi niña se ha dormido en el viaje de regreso.
De Barcelona a Monistrol de Monserrat por carretera nacional. Sí, habéis leído bien: No ha sido necesario pasar por la retahíla de peajes que se han de pagar al salir de Barcelona
Una horita de viaje y listo. Allí, otra sorpresa: parking gratis a la entrada del tren cremallera de Monistrol. Un precioso paseo en el nombrado tren cremallera hasta la plaza donde está el santuario.
Hemos hecho allí una cola de una media hojita para poder visitar y presentar nuestros respetos a la Moreneta, que se muestra gentil humilde y galante.
Allí, he recordado:
Rosa d´abril,
Morena de la Serra
de Montserrat estel
il´lumineu la catalana terra
guieu-nos cap al cel
Después, comida de picnic, paseo por los alrededores y regreso para casa con una experiencia vivida, serena, cómoda y alegre.
¡Recomendable cien por cien!
No hay comentarios:
Publicar un comentario