domingo, 5 de junio de 2011
MIDNIGHT IN PARIS
El fantástico Woody Allen, lo ha vuelto a hacer: Una película llena de magia que, con sencillez, nos enfrenta a uno de los sentimientos habituales de los seres humanos: LA INSATISFACCION CONTINUA. Y es que, pocas veces nos sentimos bien con lo que tenemos, agradecemos a la vida lo que hemos conseguido. Solemos vivir queriendo tener más, o pensando que lo de los demás, es mejor, sin darnos cuenta de que el único defecto de lo que tenemos es el poco valor que le damos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario